El diseño de Macambo, del recuerdo a la Vanguardia
En el corazón de Barcelona, este espacio de alta cocina peruana ofrece mucho más que una experiencia gastronómica: es un viaje a través de los recuerdos, las raíces y la creatividad. Bajo la dirección del chef y copropietario Roberto Sihuay, nacido en Perú y formado entre cocinas del mundo, Macambo fusiona la tradición culinaria peruana con la elegancia y sutileza del Mediterráneo. Cada plato es una historia contada desde la emoción, una reinterpretación contemporánea de los sabores que marcaron su infancia y de los productos que hoy inspiran su mirada actual. Aquí, la cocina se convierte en lenguaje, en una forma de transmitir identidad, respeto por el origen y pasión por el detalle.
Logotipo
El logotipo de Macambo nace de una idea sencilla pero profunda: la naturaleza como origen y símbolo de equilibrio. Inspirado en la fruta de Macambo, una especie nativa de la Amazonía peruana, su forma encierra la esencia del proyecto, la conexión con la tierra, la vida y la autenticidad. El trazo, elegante y orgánico, recuerda la caligrafía de las raíces que se entrelazan en la historia de Roberto Sihuay. Es una marca que susurra con sofisticación. La elección de líneas limpias y una tipografía contemporánea y retocada hasta el último detalle, refuerza la dualidad que define a Macambo: el respeto por la tradición y la búsqueda de modernidad.
Branding
El universo visual de Macambo se construye desde una narrativa coherente que trasciende la estética para convertirse en una experiencia sensorial completa. Cada elemento, desde la paleta cromática hasta la textura de los materiales, comunica los valores esenciales del restaurante: elegancia, autenticidad y conexión emocional. Los tonos tierra evocan los paisajes andinos y la calidez del hogar; los acentos dorados y verdes recuerdan la abundancia de la selva y el brillo del mar peruano. El diseño gráfico y el interiorismo dialogan con la propuesta culinaria del chef Roberto Sihuay, generando una atmósfera íntima, envolvente y sofisticada. El branding no se limita a representar una identidad visual: invita a vivir una historia. En cada detalle, el logo grabado en el menú, la textura del papel, la tipografía cuidadosamente elegida, se percibe una intención sensorial. Todo en Macambo está pensado para despertar curiosidad, placer y memoria, logrando que la marca y la experiencia sean inseparables.